Tarifas de luz y gas: preparan cambios profundos en el esquema de subsidios y habrá nuevos aumentos
Decidido a cambiar la manera en que se subsidia la energía, el Ministerio de Economía dio el primer paso para implementar la canasta básica energética (CBE). El objetivo es pasar de un esquema ...
Decidido a cambiar la manera en que se subsidia la energía, el Ministerio de Economía dio el primer paso para implementar la canasta básica energética (CBE). El objetivo es pasar de un esquema de subsidios generalizados a otro focalizado, en el que se tendrán en cuenta los ingresos del hogar, la cantidad de miembros y la zona bioambiental del país en la que viva. Así lo dispuso Economía hoy a través de la publicación del decreto 465/2024, que estableció un plazo de seis meses para aplicar la CBE, con posibilidad de extenderlo por seis meses más.
Actualmente, los usuarios residenciales están divididos en tres grupos: los de altos ingresos (N1), los de bajos ingresos (N2) y los de ingresos medios (N3). Mientras que el primer grupo recibe pocos subsidios, los de ingresos bajos y medios pagan en promedio menos del 5% de lo que cuesta la generación eléctrica.
En el Gobierno confirmaron a LA NACION que a partir del mes próximo habrá un ajuste de estos valores. Sería la primera quita de subsidios para los hogares N2 y N3 (los aumentos anteriores se dieron por recomposición de ingresos de las empresas distribuidoras y transportistas).
En estos días, por lo tanto, se espera la publicación de una resolución de la Secretaría de Energía que tendrá impacto en la actual forma de subsidiar la energía. En particular, se espera que se reduzca el bloque de consumo subsidiado que tienen los N3, que en electricidad es entre 400 kwh y 650 kwh por mes, dependiendo la provincia y la época del año. Cuando el hogar se excede de ese límite, paga un costo mayor por la generación eléctrica (lo mismo que pagan los N1).
Para los usuarios de ingresos bajos (N2), que actualmente no tienen límites de consumo subsidiado, se espera también que haya una modificación y pasarán a un esquema similar al que tienen los hogares de ingresos medios (N3), aunque con un bloque de subsidio mayor.
El Gobierno también eliminó el tope máximo establecido para aumentar las facturas de luz y gas, que tenía un límite porcentual atado al coeficiente de variación salarial (CVS) del año anterior. En 2023, el CVS fue 152,7%.
En concreto, la administración pasada había establecido que los aumentos totales de los usuarios N2 no podían superar el 40% del CVS del año anterior (61,08%) y para los usuarios N3, el impacto en factura del componente de generación eléctrica no podía superar el 80% del CVS del año anterior (122,16%). “Déjense sin efecto los límites del impacto en factura que genere la corrección del componente energía fijado como porcentaje del CVS del año anterior, contenidos en el artículo 2º del citado decreto N° 332/22″, dice el artículo 3° del decreto publicado hoy.
Luego anticipa que “los criterios de inclusión en cada uno de los niveles de segmentación previstos podrán ser revisados y modificados por la autoridad de aplicación ”.
En el mismo sentido, el decreto señala que el Gobierno podrá establecer nuevos criterios de exclusión en la segmentación de subsidios “a partir de indicadores de exteriorización patrimonial que indirectamente manifiesten nivel de ingresos”. En otras palabras, para minimizar los errores de ingresos no declarados, el Gobierno propuso que si el usuario cumple con alguna de estas condiciones, no podrá acceder al subsidio, como ser titular de una aeronave; tener al menos un auto con una antigüedad menor a cinco años o dos autos con una antigüedad menor a 10 años; tener una medicina prepaga no vinculada al empleo en relación de dependencia (total o por derivación), y haber visitado países no limítrofes en los últimos cinco años.
Según informó la Secretaría de Energía, un hogar será excluido de la aplicación de subsidios si alguno de los miembros cumple con al menos uno de los atributos de exclusión.
Para determinar los ingresos totales del grupo conviviente del usuario de gas o electricidad, el Ministerio de Economía tomará en cuenta las declaraciones realizadas en el Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE), bajo la gestión económica de Sergio Massa. En este link se puede consultar si se está registrado en el RASE.
El Gobierno dijo que analizará esos ingresos y los cruzará con las bases del Sistema de Identificación Nacional Tributario y Social (SINTyS) y otras fuentes de información a cargo de la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología, para cotejar los datos. No se trata de una tarea sencilla, como admitió esta misma Secretaría de Energía cuando criticó las falencias de la segmentación durante el gobierno anterior.
El objetivo de la CBE es que el Estado subsidie a los usuarios residenciales cuando el costo de esa canasta supere un porcentaje de los ingresos, que la Secretaría de Energía definirá. Se espera que sea alrededor del 10% de los ingresos (5% por gas y 5% por la electricidad). En esos casos, el Estado hará una transferencia directa al beneficiario, mediante una tarjeta virtual o CBU, o mediante un descuento en la factura.